Confia en la magia de los finales

Hoy, quiero que pensemos juntos en el valor que se necesita para encarar un “final” (y no de los de facultad).

Porque si queremos animarnos, si queremos avanzar, dejar de hacer eso que nos hace mal, o emprender algo nuevo, si o si vamos a tener que cerrar o terminar algo para “hacer lugar”.

Los finales son parte común y corriente de la vida. Todo empieza y termina. Pero a veces, en nuestro afán por avanzar, nos olvidamos de prestarle atención al FINAL en si. Al momento ese donde las cosas cambian, donde VOS cambias y ya no sentís o pensas lo mismo.

Los finales a veces se buscan (consciente o inconscientemente) y a veces llegan sin que los hayamos pedido. A veces pasan sin que nos demos cuenta y a veces aunque intentemos ignorarlos, llegan para quedarse. Los finales son duros, pero esperanzadores a la vez. Son tristes y alegres. Son aliviadores y pesados. Son bruscos y a veces también lentos. Los finales son extremistas. Son apasionados y tarde o temprano terminas dándote cuenta de que están ahí y no van a irse a ningún lado. Son especiales y merecen ser valorados y respetados. Tienen una historia porque todo final en algún momento tuvo un principio y entonces en el medio hay una historia. Tú historia.

Los finales son necesarios. No siempre los entendemos y no siempre estamos de acuerdo con ellos. Pero siempre, siempre, siempre los finales son una señal clara e inequívoca de que es momento de crecer. De avanzar. De mejorar y de embarcarse en la próxima aventura. Aunque no nos sintamos listos. Aunque duela. Aunque nos resistamos. Aunque nos hayamos hecho los cancheros imaginando escenarios diferentes y ahora no estemos tan seguros.

Todo final trae una magia escondida. Y lo único que tenemos que hacer para poder verla, es confiar. Es entregarnos a la aventura del final sabiendo que siempre, lo mejor está por venir.

Feliz vida💙