Disfrutemos, que para llegar hasta acá tomamos las malas decisiones más lindas que había
Y si... porque todos hemos tomado (y seguiremos tomando) “malas” decisiones, que no son lo mismo que las decisiones de m#erda de las que ya hablamos en otros post y que son las que sabes perfectamente que tenés que dejar de tomar ok?. Bien. Sigamos.
Por que después de haber tomado una “mala decisión” es re fácil criticarnos con el diario del día siguiente... una vez que la tormenta ya pasó y las emociones se acomodaron. Es fácil cuestionarnos y darle vuelta a un asunto que es parte del pasado. Y lo peor de todo, es fácil usar una “mala decisión” como una excusa para seguir estancados.
Pero para cambiar, para avanzar y para realmente moverte de donde estas, la única forma es tomando decisiones. Buenas, malas, mediocres o valientes.
Nada cambia si nada cambia y eso es lo que importa. Porque al final del día si vos no haces algo por vos, por más mínimo que sea, nada ni nadie va a poder ayudarte.
Y léeme bien: con esto no quiero decir que no pienses y que salgas a hacer y a tomar decisiones total nada importa. No!!! Con esto quiero decir que si después de haber pensado, evaluado y actuado, te encontras frente a un resultado que no te gusta mucho o no te esperabas, no pasa nada. Si después de haber evaluado tus opciones tomaste una “mala” decisión, al menos hiciste algo. Al menos trataste. A menos intentaste algo diferente en lugar de seguir en el mismo lugar, con los mismos pensamientos y las mismas reacciones.
A veces tomamos decisiones y nos equivocamos. Somos seres humanos. Y aunque algunos quieran hacernos creer que “la tienen re clara” la única verdad es que muchas cosas se aprenden mediante la famosa fórmula “prueba y error”. Asique, lo único que debería importarte, es lo que aprendiste de esas “malas” decisiones. Lo que te enseñaron de vos esas decisiones. Porque al final de cuentas lo que aprendemos de nosotros mismos es lo que nos empuja a seguir. Lo que nos da fuerza para intentar una vez más. Lo que nos muestra por dónde si y por dónde no.
Ya te lo dije antes, pero te lo repito: el dicho dice “caminante no hay camino, se hace camino al andar”. Y en eso estamos.
Comments
Post a Comment