Los grandes proyectos siempre comienzan en una servilleta

 Post para gente que tiene sueños y quiere lograr cosas.

Si alguna vez tuviste un sueño o una idea, sabes muy bien que a veces el camino “se traba” y no sabes por dónde seguir. Y ahí llega la frustración y el miedo y las dudas y las ganas de abandonar.

Una diferencia entre los que “consiguen” cosas y los que no, es que los que sí “consiguen cosas”, tienen miedo a fallar (como todos) y sin embargo avanzan y los que no, en general se dejan vencer por el miedo a fallar.

Pero la principal diferencia, es que los que triunfan, NO tienen miedo a que les vaya bien.

Si. Leíste bien: no tienen miedo a que les vaya bien. Y ya se que abriste los ojos y estás confundido porque “es obvio” que todo el mundo quiere triunfar.

Y en parte es cierto: todo el mundo QUIERE triunfar, pero no todo el mundo está PROGRAMADO MENTALMENTE para el “éxito”.

Todos tenemos lo que en Bioneuroemocion llamamos “creencias limitantes” o “creencias invisibles” que son como “leyes” mentales que nos van marcando el camino (de forma inconsciente). Las creencias limitantes son eso: cosas que vos crees que pueden ser ciertas (o no) y que van limitando tu campo de acción.

Y acá léeme bien: aunque vos creas que no tenes ninguna de esas, te aseguro que tenes mas de una. Pensa en algo que hayas querido lograr y no hayas conseguido y detrás de eso te aseguro que hay una creencia limitante que te está impidiendo lograr eso que tanto queres.

Entonces, sin importar cuál sea tu idea, tu proyecto, tu sueño, lo primero que tenes que hacer es trabajar en vos.

Lo primero que tenes que hacer es dedicarte tiempo y trabajar en tus propias creencias. En lo que vos pensas de esas ideas que vos mismo tenes... en esos “es difícil porque” y en todas esas cosas que vos juras que son así.

Porque los grandes proyectos suelen empezar en una simple servilleta, pero solo triunfan los que son dirigidos por una mente brillante.

Entonces, hoy, dejá de perder el tiempo y trabajá en entrenar tu mente. Invertí en un buen libro, un buen coach, o un curso para aprender lo que no sabes.

Porque sin mente al mando no hay proyecto que triunfe.