Tengo por día la cantidad de emociones que antes tenía por semestre

 En momentos de cambios, las emociones no tienen un orden. Ni tienen una lógica.

Tampoco tienen coherencia.
En momentos de cambios y transformación hay que estar dispuesto a transitar las emociones como uno pueda. Y cuando no se pueda solo, se debe poder pedir ayuda. Porque pedir ayuda no es de c@gones sino de valientes que quieren vivir la vida que merecen y nada menos que eso.
Si estás viviendo en una montaña rusa de emociones constante, quiero que sepas que no estás solo.
Estamos TODOS improvisando. Porque la verdad es que ninguno sabe exactamente por dónde o cómo.
Estamos todos tratando de mantenernos a flote en esta tormenta de cambios que a veces nos supera.
Y sabes que? Esta bien que así sea.
Si te sentís sobrepasado, respirá. Respira y baja un cambio. Respira profundo y confía.
Vas a ver, Vamos a estar bien.