Cuando todo sale bien también se te llena el culo de preguntas

 Cuando las cosas nos salen bien, también nos da miedo.

Marianne Williamson dice que lo que más miedo nos da en la vida no es el posible fracaso, sino darnos cuenta de lo maravillosamente poderosos que somos, y sabes que? Coincido con ella.
Coincido porque cuando las cosas salen bien, ahí es donde nos sentimos raros y no nos creemos lo que nos está pasando. Ahí es cuando nos llenamos de nuevas preguntas que tal vez nunca nos habíamos animado a hacernos... Cuando nos enamoramos y se nos enamoran al mismo tiempo, cuando pedimos y nos es concedido, cuando deseamos y se nos da, cuando apostamos y salimos “ganando”... ahí es cuando nos morimos de miedo y empezamos a dudar de nuestra capacidad para “estar a la altura”, de lo mucho que le estamos metiendo y del futuro que a veces nos amenaza con quitarnos todo de un sopetón.
Cuando las cosas “salen bien” es cuando más vulnerables nos sentimos porque no nos queda más remedio que hacernos cargo y ponernos a la altura. No nos queda más remedio que empezar a ser quienes tenemos que ser para sostenernos.
No nos queda otra, que ser finalmente quienes vinimos a ser.
Que la vida te encuentre con el c•lo lleno de preguntas, pero de las buenas, de las que nos hacemos cuando por fin nos animamos y nos lanzamos a vivir la vida que nos merecemos.
Que la vida nos encuentre haciendo con amor y recibiendo con amor. Que nos encuentre con muchas cosas “saliendo bien” y sobre todo, que nos encuentre siendo con amor.