Dice la vida que dejemos de forzar si queremos empezar a disfrutar

 Dicen los que saben que la vida nunca nos pide que sepamos sino que seamos y que entendimos todo mal porque lo único que se nos pide es que vivamos. Que juguemos. Que experimentemos y que bailemos al compas de nuestra propia música.

Dicen los que saben que no importa si hoy no conocemos el camino completo porque con saber cual será el primer paso alcanza. Dicen los que saben también que una vez que comenzamos el viaje, el universo va acomodando lo que hoy esta desacomodado y nos va marcando así el rumbo a seguir.
Dicen los que saben, que nunca se trata de entender sino de reconocer.
Y yo no se si lo que dicen es real, pero sí se que en esta vida estamos todos improvisando. Y aunque nos cueste admitirlo, estamos todos yendo y viendo y eso es lo hermoso de esta experiencia. Que nadie tiene la verdad.
Que no hay camino REAL. Que no hay recompensa esperando ni hay un secreto súper guardado porque en verdad, el premio es estar acá, hoy. En el medio del camino disfrutando de lo que podemos hoy porque total mañana no sabemos y aunque sepamos, la vida puede cambiar y lo que es deja de serlo y lo que no tenia rumbo, se arma en un abrir y cerrar de ojos.
Y es por eso, por el orden maravilloso que se esconde detrás del caos aparente, que la vida nunca nos esta pidiendo que hagamos sino que simplemente seamos.
Y que seamos con honestidad absoluta a pesar de todo, y a pesar de todos.
Y entonces qué importa si hoy no tenemos todas las respuestas? Si hoy no sabemos el camino, si hoy no conocemos el plan?
Qué importa si hoy vamos día a día en lugar de vida a vida? y Que importa si no tenemos las llaves de todas las puertas?
Al fin y al cabo, Quien dijo que para triunfar en esta vida se necesita tener el plan maestro? El mapa entero, el camino terminado?
Para triunfar en esta vida lo que si se necesita es una convicción maestra y una confianza ciega en lo que el corazón y el alma van marcando.
Por eso es que en esta vida ganan los que se arriesgan y los que se animan. Los que no piden garantías y los que a pesar de las dudas, eligen escuchar al corazón.
Tengamos el valor de ir armando nuestra propia historia aunque nos falte la mitad del mapa.