No siempre se crece hacia arriba. A veces se crece hacia adentro

 No siempre el crecimiento es hacia arriba. Hay veces donde se crece hacia adentro. En el alma y hacia el corazón.

Hay veces donde miramos hacia arriba esperando ver la prueba de tanto trabajo, pero la prueba no se ve porque el crecimiento paso adentro. En las sombras de lo que no decimos, y en el secreto de lo que aún no podemos nombrar.
Hay veces donde nos transformamos tan profundamente que nos desconocemos y hasta nos cuesta reconocernos tan distintos, tan iguales.
Hay veces donde el crecimiento se da en lo que se siente y no en lo que se hace.
Por eso es que nunca jamás debemos perder de vista la metamorfosis del adentro. Los cambios del alma y los ajustes del cuerpo.
Al fin y al cabo, los que se animan al cambio del adentro, son los que construyen vidas en el afuera que otros ni siquiera se animan a soñar.
Feliz vida de transformarnos desde adentro. Hacia afuera y desde ahí, al infinito 💜✨