La rutina es el hábito de renunciar a pensar
Post no apto para insulsos.
Cuando no te das permiso para pensar diferente, es cuando realmente entras en la “rutina”. Cuando pensas siempre lo mismo y por consecuencia actúas siempre igual, es cuando vos solo te metes en la jaula mental (que todos tenemos) y te sentís atrapado.
Cuando crees que te las sabes todas y que no hay nada más que vos puedas “hacer” porque la “culpa” esta “afuera” (en tu trabajo, tus relaciones, el gobierno, el dinero, etc) es cuando caes en la trampa mental y te cerras las puertas a todo cambio.
Es cuando te metes en la jaula de sentirte víctima de lo que te pasa y te negas a cualquier mejora, aunque vivas diciendo que queres cambiar.
Y léeme bien: todos hemos caído en la rutina mental en algún momento y volveremos a caer.
Y sabes por qué? Porque salir de la rutina de pensar siempre igual es incómodo. Porque los cambios son incómodos. Aunque nos cueste admitirlo, a veces preferimos la incomodidad y la mediocridad de quedarnos en donde estamos, en lugar de atravesar el miedo y la incertidumbre del cambio.
Y ya se que no sabes por dónde arrancar. y cuando pensas en el camino que tenes que atravesar para realmente cambiar, es lógico que sientas pánico, miedo e incertidumbre.
Pero te aseguro, que la única forma de salir de tu rutina mental (y por consecuencia de la rutina física en la que vivís), es empezar a pensar diferente.
Abrirte a la posibilidad de que tal vez no tenes razón. O tal vez lo que pensaste que era de una forma hoy es de otra. La única forma de salir de la rutina no es yéndote de vacaciones 2 semanas para volver a la misma jaula mental al final del viaje.
La única forma es trabajando la neuroplasticidad mental. Es creando nuevas conexiones necrológicas, Es rodearte de gente con pensamientos diferentes a los tuyos, es leer cosas nuevas y escuchar ideas que te sorprendan. Es abrirte a la posibilidad de que tal vez y solo tal vez, estés pensando las cosas mal. Y por consecuencia estés actuando mal.
Si queres salir de “la rutina” empezá a pensar cosas diferentes.
Y después? Después vemos.
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