Cuando la apariencia física es tu única arma, vas desarmado

 Cuántas veces al día frenamos para compararnos “mentalmente” con otro? Y cuántas veces al día nos comparamos “físicamente” con otro?.

Es cierto que lo que vemos en el espejo, muchas veces juega un rol muy importante en cómo nos vamos a mover a lo largo del día. Y debe ser por eso que estamos bastante entrenados para poder señalar con una exactitud que a veces asusta, todo lo que no nos gusta de nuestro cuerpo y somos bastante activos en la búsqueda de “herramientas externas” que nos ayuden a silenciar un poco la incomodidad que muchas veces sentimos con esas cosas que no nos gustan.

Pero no siempre tenemos el mismo “entrenamiento” o INTERÉS en mejorar nuestra salud mental. No siempre pensamos en esos aspectos de nuestra forma de SER y SENTIR que no nos gusta del todo.

Y leeme bien: cómo te ves es importante, ya lo sé y no estoy diciendo que no le prestes atención.

Estoy diciendo que es hora de que pongamos el mismo esfuerzo que ponemos en vernos bien, en SENTIRNOS BIEN. Porque cuando no nos sentimos cómodos en nuestra propia piel, no hay dieta, programa, outfit, pareja o trabajo que pueda ayudarnos a sentir PAZ MENTAL. Y esa paz mental, en general no viene de algo que “haces” sino de quién estás “siendo”.

Es hora de empezar a prestar atención a lo que no se ve pero se siente de una forma imposible de negar.

Es hora de empezar a cultivar una MENTE ATRACTIVA, con pensamientos interesantes y con una mirada de la vida que inspire. Es hora de poner el mismo esfuerzo que ponemos en entrenar o comer “bien” en PENSAR BIEN.

Es hora de empezar a mantener conversaciones profundas sobre temas profundos. Es hora de empezar a pensar mejor. A decidir mejor. A ser mejores personas.

Seamos los revolucionarios que traen temas de conversación que nos inviten a pensar, los que leen libros que nos enseñan ideas nuevas, seamos de los que comparten con amigos cosas interesantes. Seamos los que van armados con una mente brillante.

Porque en un mundo que prefiere cantidad por sobre calidad, tener una mente atractiva es lo único que nos va a salvar de la mediocridad colectiva.