Que las cosas no estén saliendo como las esperabas no significa que no estén saliendo bien

 Claro.

Porque siempre estamos pensando y tratando de controlar y manipular para que las cosas sucedan como nosotros creemos que deberían suceder.
Y cuando las cosas no salen como esperábamos, empezamos a entrar en pánico creyendo que todo está mal y que no tenemos suerte o que la vida está en nuestra contra, y ahí es donde la pifiamos. Porque en realidad, las cosas salen como tienen que salir para que aprendamos. Para que avancemos. Para que evolucionemos.
Y aunque a veces nos cueste entenderlo y aceptarlo, esa es la realidad. Y entonces, sólo se trata de aprender a vivir lo que nos toque vivir, sabiendo que a veces, lo que parece ser un “no” es solamente un “no ahora” o un “no por ahí”.
Lo que parece ser una puerta que se cierra, es solamente un Universo de oportunidades nuevas y mejores abriéndose ante vos y lo que parece estar limitándote, en verdad te está llenando de abundancia en aprendizajes y evolución.
Asique ya sabes, que las cosas no estén saliendo como vos esperabas, no significa que no estén saliendo bien.