Solo los locos que se animan a soñar, viven vidas que el resto se sienta a mirar

 Los que se animan a soñar son los héroes de la humanidad. Los que sin importar que tan grande o tan pequeño sea el sueño, caminan incontables horas, con tal de ver con sus propios ojos lo que otros solamente imaginan de lejos.

Los que se animan a soñar, son los que abren puertas, encuentran ventanas y trepan montañas.
Los que se animan a soñar, son los que escriben nuevas reglas. Los que diseñan nuevos caminos. Los que derrumban imposibles de un soplido y con calor de primavera.
Los que se animan a soñar son los que escriben las mejores anécdotas. Son los que acortan las distancias menos pensadas y son también los que vuelan al infinito y al mas allá.
Los que se animan a soñar, son los locos que todos queremos ser. Los descabellados a los que miramos emocionados cuando llegan a lugares donde ni siquiera sabíamos que se podía llegar. Los que se animan a soñar son los que ponen la cara en la bandera que queremos levantar.
Los que se animan a soñar, son los que el viento no sabe frenar. Los que ven mas allá, pero sienten bien acá. Los que no piden permiso y corren tras lo que otros, miran desde el sillón.
Los que se animan a soñar, son la nafta del resto. El motor de los que no encuentran su camino. El gps de los perdidos desesperanzados. Los que se animan a soñar son los que cambian el mundo. Los que desafían verdades ocultas, los que dejan al resto en éxtasis cuando comparten su camino.
Por eso, si de soñar se trata, dame siempre la locura de creer que lo imposible es solo lo que no se intenta. Lo que no se persigue. Lo que se deja morir.
Si de soñar se trata, dame siempre creer en las ideas que nadie mas se anima a creer y dame siempre la valentía necesaria para dar el primer paso.
Porque vos y yo sabemos que vivir una vida de sueños censurados, no es la vida que vinimos a vivir.